T i p s |
Una publicación en apoyo de los productores de setas |
Artículo del mes de Septiembre de 2003 |
LA SIEMBRA, INCUBACION Y COSECHA DE LAS SETAS (Del manual de cultivo del mismo autor, reproducido con autorización) |
Por Conrado Soto Velazco* |
SEGUNDA PARTE: CRECIMIENTO Y DESARROLLO DE LOS CARPOFOROS |
Conrado Soto Velazco |
* Acerca del autor: Cargo actual: Profesor investigador de la Universidad de Guadalajara. Ubicación geográfica: Guadalajara, Jalisco, México. Teléfono: 01 (33) 3682 0003. Direcciones electrónicas: csoto@cucba.udg.mx conrado@setascultivadas.com Más información en nuestra sección de instituciones en el enlace a la Universidad de Guadalajara o haciendo "click" en el siguiente enlace: http://setascultivadas/ug.html |
Una vez que el micelio ha cubierto totalmente al substrato es necesario trasladar las bolsas del área de fructificación a una zona destinada al desarrollo y producción de los carpóforos (llamadas en el lenguaje común "setas") con la finalidad de estimular la aparición de los primordios. Esta área deberá de tener condiciones semejantes a las que se presentan cuando el hongo se desarrolla en su medio ambiente natural, por lo cual es importante controlar los factores de ventilación, iluminación, temperatura y humedad ambiental. |
Debido a que las setas se deshidratan fácilmente es necesario regar para crear y mantener un entorno húmedo; la frecuencia de tales riegos dependerá de la temperatura ambiental. |
Como ya se mencionó la iluminación es un factor que estimula el desarrollo de los primordios o brotes de los cuerpos fructíferos (=carpóforos, =setas). La iluminación debe ser indirecta y el equivalente a la exposición natural de 12 horas al día. Una manera de acondicionar el lugar es con láminas opacas y láminas translúcidas alternadas en el techo del área. La falta de luz o la deficiencia en la iluminación induce a la deformación de las fructificaciones, así como a cambios en la coloración de las mismas. En caso contrario, si la iluminación es excesiva o directa los cuerpos fructíferos se deshidratan y se detiene su desarrollo. |
La humedad ambiental también es un factor a controlar muy importante. Sabemos, que los hongos silvestres comestibles aparecen en los bosques en la época de lluvias, por lo que para el cultivo de hongos debemos reproducir esta condición. Se necesita mantener un promedio de 85 a 90 % de humedad como óptimo para el buen desarrollo de los cuerpos fructíferos en el área de producción. |
Como se observa en la fotografía es posible obtener hongos de gran tamaño (como el de la parte superior de la fotografía) con los cuidados debidos durante la fructificación. |
La temperatura óptima que debe prevalecer en el área de producción es alrededor de los 28 ºC. Sin embargo, la temperatura puede variar de acuerdo al hongo que se pretende cultivar, ya que existen diferentes requerimientos de temperatura entre las especies de Pleurotus**. En el caso de que la temperatura descienda de la óptima, el desarrollo de los cuerpos fructíferos será mas lento de lo normal o en caso extremo se inhibe su desarrollo. En caso contrario si la temperatura se eleva, los cuerpos fructíferos y el mismos substrato se deshidratarán. |
Una vez que los cuerpos fructíferos han madurado y antes de que los bordes empiecen a enrollarse hacia arriba, se procede a la cosecha, la cual debe de realizarse desde la base donde se forma el cuerpo fructífero en el substrato (figura superior). |
Se recomienda no dejar ningún fragmento de la fructificación adherido al substrato, ya que el residuo facilita la implantación de mohos, que evitarían o inhibirían el desarrollo deposteriores fructificaciones (ver figura inferior). |
La cosecha de los carpóforos o fructificaciones se realiza desde la base donde crecen, poniendo especial cuidado de no dejar residuos del carpóforo, ya que ocasionaría la contaminación por mohos, bacteria o virus. |
El control de la ventilación es indispensable en esta área por lo que se recomienda renovar el volumen de aire de 4 a 6 veces por hora; es conveniente auxiliarse de extractores de aire. La ventilación se realiza con el fin de bajar la concentración de CO2, ya que una alta concentración produce deformación en los carpóforos, que se manifiesta principalmente en el alargamiento del pie. Por otro lado, a través de la ventilación se eliminan las esporas que producen los cuerpos fructíferos en grandes cantidades y que al encontrarse en el ambiente pueden producir efectos alérgicos en las personas que trabajan en esa área. |
** Para las variedades oscuras la temperatura óptima de fructificación es entre los 16 y 20 grados centígrados (nota del editor) |